Saturday, March 29, 2008

Sueño del 28 de marzo

Me deslizo en longboard por una calle. Voy haciendo zig zags, para no caerme. Entonces me fijo en un hoyo en el pavimento. El hoyo parece ejercer una fuerza sobre la tabla, que se arrastra sola hasta perderse en el fondo. Yo miro desde la superficie. En realidad el hoyo es una especie de cueva, donde vive un perro perdiguero muy grande, que tiene la habilidad de andar en dos patas y subir escaleras. El perro vive en la cueva, bajo el pavimento. Se escucha el eco de gotas cayendo. Hay agua en el fondo. El perro se acerca a mí. Siento un poco de miedo, pero quiero recuperar mi tabla. El perro sube la escalera, llega a la superficie y baja por otra escalera al costado del camino.

Tuesday, March 25, 2008

Sueño del 24-25 de marzo

Salgo de un bar con alguna gente. Uno de mis amigos comienza a provocar a los transeúntes. Vamos con unas chicas y es de día. Pasan unos tipos en bicicleta. Llegamos a una esquina. Es una intersección de dos grandes calles. Pasan camionetas con música a todo volumen y muchachas gritando por la ventana. Al otro lado me espera mi ex mujer acompañada de mi hija. O creo que soy yo el que llevo a mi hija, a la cual tuve que cortarle un brazo, o sacárselo más bien, como si fuese una muñeca, ya que no tiene heridas ni hay sangre. Cuando llego a la otra esquina se hace de noche. Mi ex me dice que no puede pegarle el brazo. Entonces yo lo intento, pero tampoco me funciona. Le digo que voy a la farmacia, a buscar pegamento. Antes entro a un bar, donde hay una amigo que se pasó de copas y a quien tengo que sacar. Hay alguien poniendo música. Mi amigo borracho se da vuelta. Es Dr. House. Yo le quito el whisky y me lo tomo de un sorbo. Entonces recuerdo a mi ex y a mi hija y salgo a la calle. Nada.
Estoy en el segundo piso con un amigo. Le pregunto cuándo se va a llevar sus amplificadores que están en mi pieza. Bajamos las escaleras. Yo bajo flotando. Mi hermana me pregunta qué me pasa. Mi amigo se va y yo voy a la cocina a ver qué hay de nuevo en mi correo. Internet está muy extraño.
Estoy en mi antigua casa. Hay una tormenta. Mi hija se despierta. Hay goteras en la escalera. El cielo está increíble. Hay unas nubes negras que se acercan. En el horizonte aún se distingue una línea de cielo blanco, bajo la masa de nubes oscuras. No puedo distinguir a qué hora sucede todo. Vemos televisión. Afuera los vecinos discuten. Jamás había visto nubes tan negras.

Friday, March 21, 2008

Sueño del 20 de marzo

Miro por la ventana desde el segundo piso de mi casa. El día está nublado. En lugar de la casa del vecino hay una gran portón abierto. Hay un gran movimiento de gente, camiones que traen cosas, etc. No resisto mi curiosidad y bajo a la calle a ver de qué se trata. Algo sorprendido, compruebo de que se trata de una editorial, con librería incluida. Hay grandes libros sobre atriles. Me llama la atención uno de ellos, escrito en inglés por Gloria Simonetti (¿?). El hall de entrada da paso a un pasillo angosto y menos iluminado. A la izquierda hay un closet tan largo como el pasillo. Mientras espero que la encargada me atienda, hago una breve inspección a lo que hay sobre el mueble. En medio del desorden encuentro unos rollos de película antiguos, muy mal conservados. Pongo el rollo a la luz, pero no es posible distinguir gran cosa. La encargada no parece notar mi presencia, demasiado ocupada con otro cliente. En eso llegan un par de colegas que no veía desde hace años, de cuando trabajaba en la editorial. Los saludo afectuosamente. Ellos me dicen cosas como: “¿Qué te has hecho?”, “Estás más delgado”, y cosas por el estilo. Yo les devuelvo palabras comunes y corrientes. Ellos parecen ocupados en otra cosa y siguen su camino, mientras que yo decido volver a la calle, echando una última mirada al hall, donde además de libros me doy cuenta de que hay unos instrumentos de cuerda sumamente raros y que no me atrevo a tocar. Afuera uno de los dueños de la editorial conversa con alguien que parece ser un repartidor o vendedor, yo salgo por un costado y no me ve.

Monday, March 17, 2008

Sueño del 16 de marzo

Me levanto temprano para ir al trabajo. Hago enormes esfuerzos por abrocharme las zapatillas. No puedo despertar del todo. Hay más gente en la casa. Mi novia fuma con el profesor de mi hija. Yo salgo. Dentro de la casa es de día, afuera todavía no amanece. Subo a una bicicleta, debo llegar a la calle donde tomo el bus. La hora parece avanzar velozmente cada vez que cierro los ojos. Mi novia me pregunta si se puede tirar al tipo. Yo la abofeteo, pero parece no importarle. Mis cordones siguen dándome problemas. Me frustro, me resigno a llegar atrasado. Ya no iré a trabajar. Pego portazos. Unas gringas hablan en inglés y se ríen. Decido ir a trabajar y tomo un bus. No hay ningún pasajero. Está fuera de servicio por lo visto. Me subo de todas formas para que me lleve a cualquier parte.

Thursday, March 13, 2008

Mi amigo CAT


Hace tiempo que no nos veíamos con mi amigo Cristian. Nos pusimos a caminar hacia el centro, buscando algún bar para tomar un par de cervezas. Habíamos fumado algo de marihuana antes de salir, así que el atardecer nos sentaba bien. "Santiago está cambiado" me dijo. Estábamos al lado de Estación Central. Rechacé la opción de La Piojera, por ser demasiado tentadora. "Si entro no salgo", le dije. Seguimos caminando, hacia Plaza de Armas. Vimos unas imágenes increíbles. Lamentamos no andar con cámara. Personas barriendo las calles, levantando el polvo con el sol poniéndose en el horizonte. Como un pasillo de luz. Qué atardecer. "Tienes que salir; ir donde las papas queman. A ti te iría bien en Alemania", me dijo. Luego Cristian trataba de decir algo, pero no podía. Gesticulaba, se llevaba las manos a la cara y negaba con la cabeza. Yo estallé en risa. Recordé que por eso éramos amigos: muchas veces no era necesario explicar las cosas. Yo siempre entendía. Entonces recordé cuando lo conocí ahí en el departamento de la Trini, su reclusión nocturna, su taller del barrio Brasil y la inolvidable guerra de naranjas, su ida a Bolivia, el viaje a la playa y las diapositivas de la caleta, su casa al frente del shop negro, la película dondé actué y que él y Nancy dirigieron. Todo eso había quedado atrás.
De pronto nos encontramos al medio de la Plaza de Armas. "Salgamos de aquí" dije yo. El gentío siempre me pone nervioso. Mi amigo, al contrario, se veía relajado. Admiro eso en él, el meterse así en medio de la multitud, en la incertidumbre, a diferencia de mí, siempre buscando refugio de manera un tanto pusilánime. Seguimos caminando. "¿Y si pasamos al 7?". Pero el 7 ya no era bar, sino solo restaurant. Vimos unas pantallas gigantes al frente de la Biblioteca Nacional. "No sabes el laboratorio que es Chile", me dijo. Seguramente yo le contesté alguna burrada que había leído en un ensayo. Finalmente nos olvidamos de la cerveza y optamos por un café turco, donde Julio. Las cervezas vinieron al rato. Eso y una buena música.

Monday, March 10, 2008

Sueño del 11 de marzo

Camino por unos pasillos de una universidad a cargo de los hermanos maristas. Voy en busca de un piano, pero todos están ocupados. Entonces descubro un piano en el pasillo. Es un piano pequeño, casi de juguete, y está camuflado entre unos libros. Me siento en el sillín, y comienzo a tocar. Está un poco desafinado pero igual me servirá para la canción. Llega mi amigo Ernesto que me hace unos comentarios sobre los libros en la repisa. Hay uno de Durkheim. Saco el piano y me lo llevo. Luego voy sobre un monociclo por las calles de Santiago. Con mucha facilidad entro a un condominio. Un tipo que está regando le hace un comentario a una chica, sobre las clases de gimnasia. Yo paso por el lado.
Luego estamos en mi casa. Yo tengo el piano debajo del brazo. Estoy un poco urgido porque tengo que devolverlo antes de que los maristas se den cuenta de que no está. Estoy preparando una buena excusa. Llega una niña retrasada a repartir calendarios. Los entrega sin preguntar, sin decir nada. Yo lo rechazo. Tengo que irme con unos amigos. La niña viene con nosotros. Yo pregunto que quién la dejó entrar a la casa. No veo por qué tengo que hacerme responsable. Además tengo que devolver el piano. Al verme alterado, mi padre asume su responsabilidad. Él fue quien la trajo a la casa, por lo tanto debe hacerse responsable. No quiere problemas conmigo así que no me discute mucho. Al salir veo un tipo que se acerca con un bolso. Al verme se da vuelta y comienza a correr.

Sueño del 10 de marzo

Voy en una bicicleta pistera por la alameda. Es de noche y pedaleo con mucho esfuerzo. Me cuesta tener los ojos bien abiertos. Cuando doy la vuelta escucho una conversación de unos tipos sentados en una banca. Están hablando de autos, de dinero. Uno habla muy fuerte, lo escucho como si estuviese a mi lado. Doy la vuelta por una calle, salgo de la alameda. Se hace de día. Puedo ver claramente. Llego a mi casa. No puedo entrar. Hay alguien en una cama. Alguien está haciendo un ritual. Todos tienen papeles en la mano.

Tuesday, March 04, 2008

Sueño del 3 de marzo

Un niño ve a una mujer japonesa a través de la vitrina. Sale de la tienda y la sigue. La mujer va a comprar al comercio ambulante. El comerciante vende máquinas antiguas. Tiene un brazo ortopédico con un cuchillo al final.
En la noche, un amigo nos invita a tomar algo. Anda en una citroneta azul. Como no hay nada abierto decidimos sentarnos en una esquina. Compramos algo de queso y vino.